AMANECER LIBÉLULA ALFÉIZAR AZUL AGUA

Volvíamos a casa un tanto apesadumbrados, después de ver en el Mene “El amanecer de la libélula”, una película china que era como para tirarse desde el alféizar de la ventana del noveno piso. Nos sentíamos como si hubiésemos tirado las quince pesetas de la paga de la semana al váter y hubiésemos tirado de la cadena. Menos mal que, al menos, los curas habían tenido el detalle de regalarnos un burmar flash azul y una botella de agua y volvíamos a casa haciéndonos burla con la lengua pintada…, ¡y gracias que la semana siguiente echaron una de Charlton Heston!

(Relato para "Cinco Palabras" VOL.VIII SEGUNDO AÑO)

Besitos a todos.

Pequi.