CHIMENEA DÁLMATA MARIPOSA LEÓN DESCANSO
Cheles estaba completamente alterada, muy nerviosa y es que esta era la noche en la que ese hombre bonachón y regordete, vestido de rojo, bajaba por la chimenea a dejarle su regalo. Cheles le había pedido a Papá Noel un cachorrito de dálmata y no podía esperar más por tenerlo. Se pasó la tarde revoloteando por el salón como una mariposa y su tripita rugía como si fuera un león. Al final del día llegó la hora del descanso y Cheles se fue a la cama sabiendo que a la mañana estaría su nuevo compañero esperándola. ¡Felices sueños perrunos, Cheles!
Un saludo a todos.
Pequi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario