BORRACHERA ENAMORAMIENTO HIPNOTIZAR ENCUENTRO FINAL
Aquel vinilo de José Luis Rodríguez no dejaba de dar vueltas y más
vueltas y no sabíamos si el mareo era provocado por la borrachera que
llevábamos o por los giros del disco del felino. Igual hubo enamoramiento. Igual no. Quizás fue
follar por follar pero al levantarnos de la cama, el plástico negro de 45 rpm,
que seguía girando, nos volvió a hipnotizar. Cada uno tiró por un lado del
catre y el encuentro en el centro del colchón llevó de nuevo a lo mismo... ¡Lástima
que la botella de tequila vacía nos delató que había llegado el final!
(Relato para "Cinco Palabras" VOL. II CUARTO AÑO)
Un abrazo a todos.
Pequi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario