RELOJ VERANO CENIZAS CARIÑO FUTURO

Estaban dando la casa del reloj y mi hermano pequeño y yo estábamos deseosos de que acabara para ver las aventuras de Gaby, Fofó y Miliki. Era el verano del 73 y hacía mucho calor, pero cuando uno es chiquitín no siente el calor ni con la casa hecha cenizas. Javier y yo nos habíamos fabricado un coche con los sillones orejeros a la espera de que Fofó cantara la canción del auto nuevo… ¡qué cariño le cogimos a esa canción y cómo lo pasábamos arrastrando los sillones por todo el salón sin más futuro que los chiripitifláuticos! ¿Te acuerdas?

(Relato para "Cinco Palabras" VOL.VI SEGUNDO AÑO)

Un abrazo.

Pequi.