Vamos con las "Dulzales"

Siempre me gustaron las aceitunas, cuando vivía en Madrid me hinchaba a comer aceitunas de Campo Real, pero fue tras conocer a mi aceitunera y volverme yo también aceitunero cuando empecé a descubrir las variedades de aceitunas verdes andaluzas y a disfrutar de ellas. Primero descubrí que la picual partida y bien preparada tenía un sabor a aceite delicioso y esa es la que suelo preparar yo todos los años, que por cierto para el fin de semana del puente ya la estoy cogiendo. También del pueblo es la royal, pensada para el verdeo, pero me resulta más sosa que la picual. Hay otras famosas variedades de verdeo como la manzanilla, la moraleja, la verdial y la zorzaleña..., pero hay una, que cuando la descubrí vi el cielo abierto... Es para mi la dulzal la reina de la aceitunas de verdeo, no se parte por no tener casi jamila, en pocos días en agua ya está lista y si se le ponen trozos de sarmiento en la salmuera toman un sabor entre amargo y acido que junto a su crujir en la boca la convierten en la acompañante ideal de la cerveza..., y al ser esta la bebida oficial de los partidos que veo con mi buen amigo y vecino Luis, que, por cierto, fue quien me introdujo en el insondable mundo de las dulzales, os podéis imaginar como nos vamos a poner pasado mañana para el Barça-Atleti que nos va echar la sexta..., ¡se me hace la boca agua sólo de pensarlo!..., ¡ah!, y no os preocupéis por mi físico, que luego estoy dos días corriendo y lo bajo...

Besos y abrazos.
Pequi.