Cuidado con las murusas

Es curioso lo de las deformaciones que el lenguaje, sobre todo el hablado, llega a tener. De todos es sabido que las playas españolas y las granadinas, sobre todo estos último años se llenan de medusas, hasta el límite de no poder bañarte; pero algo que no se escapaba a mi vista, sí lo hacía al oído... y es que no veáis lo que me costó relacionar, en Torrenueva, que las "murusas" eran esos bichos que flotaban en el mar (dicho además con la boca semicerrada es más complicado, probadlo si tenéis a alguien cerca, decidle "cuidado con las murusas", muy rápido y con la boca semicerrada - o abierta comiendo un polvorón...). Pero digo yo, no sería posible, si creo que ya están consiguiendo hacer cremas faciales con las "murusas", no sería posible digo, comérnoslas de tapilla con la cerveza, si en realidad son babosillas como los caracoles y de un color parecido, ¿os imagináis?, a los que nos gustan los caracoles claro, de un solo bocado quedar totalmente satisfechos, no tener que andar hurgando con el palillo uno tras otro para, al final, no haber tenido, ni siquiera, suficiente... Pues nada, decidido, alguno probadlo este fin de semana (tú mismo O'Tití, que siempre te he visto comiéndolos con ansia en el Esteban) y luego me decís, que como funcione, a los que nos gusta la cerveza con tapa hemos dado con una mina y al que le gusta la playa para bañarse (que también lo hay) le haremos un favor.

Un saludo y ¡temblad murusas!
Pequi.